aura Dicún, estudiante de segundo año en la Universidad de St. Mary en San Antonio, no esperaba que lo mejor de su primer año como consejera de un campamento de verano, involucrara a un par de niños tímidos. Pero de todos los desafíos que experimentó en el campa- mento, organizados por la universidad y Holy Rosary, la parroquia marianista ubicada junto al campus, estas relaciones demostraron ser las más fructíferas. “Descubrí que a los tres nos encantaba jugar tag”, dice ella. “Después de eso, ¡querían jugar todos los días!” Era la apertura que Laura estaba buscando: un puente que la conectara con los niños, sus familias y la comunidad alrededor de la univer- sidad, conocida como el West Side. Hace cincuenta años, un documental ganador del premio Peabody titulado “El hambre en Estados Unidos” mostraba con vívidos detalles AGENTES CAMBIO La parroquia Holy Rosary y St. Mary's University se unen para ofrecer un campamento de verano para niños y familias que viven en uno de los barrios más vulnerables de San Antonio. Por Alex Z. Salinas de Laura Dicún, estudiante de St. Mary y voluntaria de Summer of Service, disfruta de jugar con Joaquin Gonzales, Ruben Castañeda y Sebastian More. Página opuesta: Alexis Soto, voluntaria de St. Mary's Summer of Service, desafía a Abigaile García a una carrera. L